que me temas
que no te acerques
pues de una u otra manera
te devoraría sin problemas
que acabaría contigo
y tu inocencia de corderito
que no éramos pares
que veníamos de mundos desiguales
que yo era una fiera
y tu pura inocencia.
Te advirtieron no te acerques,
no lo ames, no lo toques, ni lo veas
pues sus ojos te hipnotizan
y te devoran las entrañas
antes que pestanees
nunca le des la espalda
ni le muestres tu frágil cuello gentil
pues sabrá encontrar tu yugular
y con un beso de su boca
podrá arrebatar de tu cuerpo el alma.
Te dijeron que te alejes
pero tu me aceptastes como era
pues amabas nuestras diferencias
y sabías que tanto como tu sabía
que no éramos distintos
si no amantes complementarios.
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